En momentos como estos sería ideal que alguien estuviese aquí para jugar a “Piedra, papel, tijera, lagarto, Spock” pero contando que muchos no lo comprenderían esto se vuelve algo complicado. Así que añadiré la secuela del post anterior, una nueva contestación que recibí esta misma tarde, de entre todas la más directa; Gilipollas.
Hay momentos en los que por causas bastante evidentes no puedes hacer determinadas cosas, y en las que por otros motivos bastante evidentes para la otra persona tampoco lo contrario, en ese choque de intereses, no necesariamente lineal ni si quiera opuesto, surge una conversación que la primera parte necesitaba mucho más que la segunda, pese a que esta última recibe también su dosis para cuando pueda pararse a ver (si es que quiere tal cosa). Algo en claro me va quedando, ahora después de todo lo removido habrá que esperar a que el agua se calme y muestre un poco el fondo del lago.
No hay comentarios:
Publicar un comentario